Los orígenes de Hamburgo no se encuentran a orillas del Elba, sino a las de su afluente el Alster. Fue a orillas de éste donde en el siglo VIII se asentaron los primeros colonos, a poca distancia de su desembocadura en el Elba. Hacia el año 830 se construyó aquí la Hammaburg (ham = palabra del antiguo sajón que significa orilla).
En el siglo XII el Elba alcanzó mayor importancia. El comercio en el área del norte de Europa se desarrolló con gran rapidez. En 1189, Hamburgo obtuvo por parte del Emperador Barbarossa el privilegio de recaudar aranceles en el Elba, y se convirtió en Ciudad Libre Imperial.
Con el tiempo se desarrolló una unión medieval de ciudades en el norte de Europa: la Liga Hanseática o Hansa. Hamburgo fue el puerto más importante del Mar del Norte para la Hansa, y sirvió para despachar cereales, telas, pieles, arenques, especias, madera y metales. Hamburgo mismo adquirió fama por su artículo de exportación más importante: la cerveza.
Tras el descubrimiento de América y del camino marítimo hacia Asia, Hamburgo se convirtió, a partir de 1550, en uno de los puertos de importación más importantes de Europa. Con el incremento de la navegación marítima y el comercio mundial en la segunda mitad del siglo XIX, Hamburgo tuvo que ampliar sus capacidades portuarias y de almacenamiento. La construcción de la Speicherstadt o ciudad de los almacenes (1881 – 1888) fue el primer paso. En las décadas siguientes el puerto fue ampliado hacia la otra orilla del Elba.
La creación del puerto franco (1888) convirtió Hamburgo en uno de los mayores almacenes de café, cacao, especias y alfombras. La construcción del canal entre el Mar del Norte y el Báltico (1895) incrementó aún más el atractivo del puerto ya que con él quedaba asegurada la rápida conexión con el área del Mar Báltico.
Hamburgo no se convierte en metrópoli hasta 1900
Hasta mediados del siglo XIX Hamburgo no rebasó los confines medievales de la ciudad. Durante mucho tiempo, Sankt Pauli, Altona y Sankt Georg, que hoy en día son barrios de la ciudad, se encontraban al otro lado de las puertas de acceso a la ciudad. Hacia el año 1850 la población se cifraba en tan sólo 50.000 habitantes.
Fue a partir de 1860, con la industrialización, que un número creciente de localidades vecinas fueron integradas en el término municipal. Hacia el año 1900 la ciudad ya contaba con un millón de habitantes. En el año 1937, con la llamada Ley del Gran Hamburgo, la ciudad recibió los confines vigentes hasta la fecha.
Los recuerdos de los hamburgueses
Cuatro acontecimientos históricos sobresalen entre los recuerdos de los hamburgueses:
1. La ocupación por parte de las tropas napoleónicas de 1806 a 1814. Por un lado, significó para Hamburgo renovaciones democráticas, pero por otro, penurias económicas y sociales.
2. El gran incendio de 1842 que destruyó un tercio de la ciudad. La catástrofe también tuvo consecuencias positivas: Hamburgo fue reconstruido según ideas modernas.
3. Los bombardeos de 1942. Fueron la respuesta a los ataques alemanes, pero la población de Hamburgo fue más dañada que muchas otras ciudades del mundo. La mayor parte de Hamburgo quedó destruida, murieron miles de personas.
4. La gran marea alta de 1962 que inundó gran parte del norte de Alemania, y también de Hamburgo.
Fernando
07/12/2021 at 14:24
Gracias por publicar interesantes datos de la ciudad origen de mis padres.
Que emigraron a chile por una de las guerras…
He visitado Hamburgo 4 veces y me encanta.
Porque sera…