En los alrededores del Castillo Sforzesco es donde podemos encontrar el parque Sempione, que es uno de los jardines más hermosos de Milán, pues cuenta con aroyos, prados verdes y frondosos árboles, lo que hace que sea un gran atractivo para los turistas. Está ubicado en la parte posterior del Castillo Sforzesco, cercano al Arco della Pace y es considerado el espacio verde con mayor importancia en toda la ciudad, lugar que se hace ideal para relajarse y disfrutar de un ambiente abierto y un aire puro.
El parque Sempione fue creado en 1888 debido a la solicitud y pedido de la gente de albergar más áreas verdes para el esparcimiento; La intención también era la de crear espacios libres y románticos con árboles y arbustos; caminos, estanques y canales. Además el parque tiene gran aceptación entre los milaneses por ser un adecuado lugar de ocio así como de exposiciones artísticas.
Asimismo, en el parque Sempione es posible contemplar la Arena Napoleónica, el Acuario, la Torre Branca, el Teatro del Arte y la Biblioteca Municipal, mientras que los pequeños estanques y románticos puentes son frecuentados por muchas parejas. Igualmente, existen otros servicios como espacios reservados para los perros, seis quioscos con servicio-bar, baños públicos, teléfonos y más.
Para ofrecer mayores beneficios, el municipio de Milán proporciona una red de Internet inalámbrica que cubre toda el área del parque, lo que hace de éste un grato lugar donde pasar el rato.