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Santo Domingo

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Santo Domingo de Guzmán, generalmetne llamada sólo Santo Domingo, es la primera ciudad fundada por europeos en América. Es la capital de la República Dominicana, fue fundada en 1496 por Bartolomé Colón y luego trasladada por Nicolás de Ovando en 1502 a la parte que hoy ocupa, la cual es llamada como Zona Colonial.

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La Zona Colonial de Santo Domingo ha sido reconocida por la UNESCO como Patrimonio de la Humanidad.

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1 comentario

  1. Rosario Miranda

    21/10/2019 at 00:33

    Estuve en Santo Domingo y Punta Cana para festejar mi 65 Cumpleaños. En Punta Cana me alojé en el Barceló Bávaro Palace. Viajaba sola. El 11 de octubre me metí a nadar al hermoso mar. Al salir, pisé algo -todavía dentro del agua- que cortó mi dedo gordo y mi pie sangraba profusamente al salir. Los salvavidas estaban limpiando las boyas lejos, donde termina el complejo y empieza el de adultos. Yo los había visto en mis caminatas. El personal de seguridad que estaba en la parte de abajo de la caseta del salvavidas, los llamó por radio. Vino uno de nombre Reimy Concepción quien fue muy atento y diligente. Lamentablemente, se ve que no les dan la capacitación requerida ya que trajo o le trajeron una botella partida por la mitad con agua que sacaron de no sé donde. ¿De la alberca? ¿De las regaderas para enjuagarse? me «limpió» la herida con una gasa y esa agua y me puso un curita. (Band-Aid) Me dijo que iba por una silla de ruedas. Como no regresaba, yo empecé – como pude – a caminar hacia el lobby. Entonces me percaté de que mucha gente estaba mirando hacia la alberca del SPA. Ahí pude distinguir que le estaban dando CPR a una persona. Entendí que mi emergencia no era la peor así que seguí caminando hacia la enfermería. Ahí me dijeron que el «Doctor se fue con la ambulancia». También se fueron todos los salvavidas. Que esperara media hora. Esperé y tuve que esperar por 1 hora más. Cuando me recibieron la «Doctora»- sin ninguna ética- lo primero que hizo fue preguntarme si era yo premier. Le dije que no. Entonces me dijo que me cobraría $$160.00USD por la consulta y $$40.00USD por la curación. Le dije que el accidente me había sucedido en la playa del hotel. Me contestó que ella era externa al mismo. Le dije que yo traía seguro. Me preguntó por mi Compañía y a continuación me dijo que ella no trabajaba con ella. Entonces le dije que me pidiera una silla de ruedas pues en mi ir y venir ya me había lastimado el otro pie con mi sandalia. Me dirigí al Lobby donde una excelente empleada: Katherine Olaverría, me ayudó a comunicarme con mi seguro y ellos me dieron indicaciones de irme al hospital. Tuve que ir a mi habitación a quitarme el traje de baño mojado y cambiarme. El botones – de nombre Rubén- fue excelente. Me llevó en la silla de ruedas y un carrito de Golf. De ahí volví con la Concierge, que para mi tristeza ya no estaba, y otra me solicitó un taxi. Éste tardó mucho en llegar. Me llevó al Hospital y me cobraron $20.00 USD. Este chofer, si me aceptaba Pesos Dominicanos pero pensando que a la vuelta me traería un taxi que no sería del Hotel, a él le pagué con dólares. En el Hospital me lavaron bien la herida, me suturaron y me pusieron la vacuna antitetánica ya que yo no pude ver con qué me corté. ¡Excelente la atención en el Centro Médico Punta Cana y del Dr. Castro, Ortopedista y Traumatólogo. Al volver al Hotel vino por mi un taxi del mismo que no me quiso recibir moneda local. En total hice un gasto de $$40.00USD de los cuales el hotel no se quiso hacer cargo. Traté de hablar con el Gerente del Hotel pero me negaron la comunicación. La Srita. Maryam Tatis me dijo que eso lo viera con mi seguro y que ella lo único que podía hacer era enviarme mi cena «sin costo» a la habitación. (Cabe decir que se había pagado un All-Inclusive por 2 personas cuando yo viajaba sola) El Doctor me indicó que ya no podía ir a la playa ni mojarme el pie. Llamé al Concierge de mi bloque y fui atendida excelentemente por el Sr. Darling Tavera Acosta quien no sólo me dio una excelente atención sino que personalmente fue a llevarme las bolsas plásticas que necesitaba para cubrir mi pie y las «gomas» para ajustarlas. A diario se preocupó por mi estado de salud y pues yo estaba muy frustrada pues mi festejo se acabó ahí y yo había ido para estar en la playa. El siguiente día me tuve que conformar con ver el mar desde la alberca ya que aunque yo había solicitado una habitación con vista al mar, me la dieron con vista al jardín. Me sentí terriblemente decepcionada. Yo he viajado por varias partes del mundo y nunca había tenido una experiencia así. De no ser por la Srita. OIaverría y por el Sr. Tavera Acosta así como del Botones Rubén, me hubiera llevado la peor imagen de mi estadía en Punta Cana. Anteriormente había estado en Santo Domingo y lo disfruté mucho de no ser por las hordas de «guías de turistas» que no lo dejan a uno en paz. Y la atención en el Sheraton de Santo Domingo fue muy diferente. Lo que sí, caminé desde la Ciudad Vieja hasta mi Hotel y es terrible ver todas las orillas llenas de basura. ¡Una pena!! De volver a Punta Cana, nunca lo haría al Barceló Bávaro Palace y sólo iría ahí para poder volver a agradecer a los buenos empleados y al Salvavidas a quien busqué pero ya lo habían enviado de vacaciones. A mi regreso, mis dos pies se hincharon mucho y tuve que utilizar silla de ruedas y recibir atención médica. ¡Lamentable!!

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