La Avenida Corrientes es una de las Avenidas identificatorias de la ciudad de Buenos Aires y eje de la vida nocturna. Recibió su nombre oficial en el año 1822 en honor a la provincia que lleva el mismo nombre y debido a que fue la primera en adherirse a la causa de la independencia argentina. Fue en los bares y teatros que sobre ella se ubicaban que nació el tango, con grandes orquestas e importantes cantantes como Carlos Gardel.
Originariamente esta Avenida no era más que una calle angosta, comenzando su ensanche en 1931 y culminando las obras en 1936. La zona financiera abarca el primer tramo de la Avenida, hasta el cruce de la peatonal Florida, donde se transforma en un centro de diversión con espectáculos, librerías, pizzerías y bares. Llamada también «la calle que nunca duerme», adquiere carácter comercial en el cruce con Avenida Callao, donde podréis encontrar locales comerciales de todo tipo y para todos los bolsillos. Otro sitio de interés en el trayecto es el barrio del Abasto y culmina en el Cementerio de la Chacarita, el más grande de la ciudad.
El recorrido alcanza unos 8,6 km y cuenta con más de 70 cruces, entre ellos la Avenida 9 de julio donde se eleva majestuoso el Obelisco de Buenos Aires. El primer ferrocarril del país circuló por esta Avenida, al igual que el tren y el denominado «tranvía de la muerte» en 1871, cuando la fiebre amarilla causaba estragos. Una Avenida que exhibe diversos estilos arquitectónicos que van desde el art nouveau al neogótico moderno y que exhibe en cada una de sus 40 esquinas -a instancias de la Asociación de Amigos de la calle Corrientes- placas recordatorias de importantes personalidades del tango.
En ella podréis encontrar todo tipo de cines y espectáculos, teatros y teatros de revista, además de cafeterías tradicionales y pizzerías que funcionan hasta altas horas de la madrugada. Entre las calles Cerrito y Callao se agrupan gran cantidad de librerías, donde podréis adquirir libros usados, antiguos y best sellers a excelentes precios y con importantes descuentos. También hay gran cantidad de puestos de flores y artesanos que ofrecen sus productos en las aceras. Si queréis degustar el tradicional chocolate con churros, no dejéis de pasar por La Giralda, mientras si lo que os gustaría es ver algunas personalidades del ambiente artístico, periodistas o cineastas, nada mejor que el Café Ramos. Las mejores pizzerías son Los Inmortales, Banchero, Las Cuartetas y el Palacio de la Pizza.
Las más importantes compañías teatrales se concentran en torno al Obelisco, entre la avenida Callao y la calle Esmeralda, con salas como el Maipo, el Gran Rex, el Astral, Lola Membrives, el Metropolitan, entre otras.
