Palacio Real de Ámsterdam

Construido en el año 1648 en base al diseño de Jacob van Campen, el Palacio Real de Ámsterdam fue originariamente erigido para ser utilizado como Ayuntamiento, aunque posteriormente en el año 1808, el Rey Luis Napoleón decidió convertirlo en un palacio. Actualmente en este Palacio se llevan a cabo diversas recepciones oficiales ofrecidas por la Reina Beatriz y pueden admirarse gran parte del mobiliario imperial como así también relojes y arañas que datan de aquellos tiempos.

Levantado sobre 13.650 pilares de madera enterrados en la arena, se trata de una edificación clásica decorada íntegramente con bajorrelieves, destacándose especialmente sobre la fachada anterior, una increíble cúpula que exhibe el símbolo de la ciudad, consistente en una barca sobre la cual se encuentran dos perros y dos hombres y una escultura en la parte anterior que representa a Atlas sosteniendo el mundo. Para poder acceder al Palacio se pueden coger los tranvías de las líneas 1, 2, 4, 5, 9, 13, 14, 16, 17, 24 o 25. La entrada tiene un coste de €4,50 y permanece abierto al público los días martes, miércoles, jueves, sábados y domingos de 12.30 a 17.00. También es posible contratar visitas guiadas, lo que debe reservarse con un par de semanas de antelación.